Que nada apague tu luz
Que nada te haga olvidar como brilla y florece todo por dentro
Que nada te ponga en lugares más pequeños de los que puede afirmarse tu corazón
Que nada te borre los sueños que tuviste de niña que forjaron tu ilusión
Que nada apague la música de ese baile con el que goza aquella bailarina dentro
Que nada te prohíba la libertad de pausar, de cambiar y de volver a empezar
Que nada te impida llorar, porque el llorar siempre fue para tu alma un limpiar
Que nada derroque tu voluntad
Que nada te impida sanar lo mismo, una y otra vez, las veces que puedas necesitar
Que nada te haga dudar que tu alma vuela,
y es hora de que vuele aún más
Que nada te haga olvidar
Que sos Luz
Y que el mundo necesita
Tu iluminar
Abrazo,
Bel